jueves, noviembre 02, 2006

quiromancia: tercera parte

LOS CUATRO TEMPERAMENTOS

Según la quirología y quiromancia, existen cuatro temperamentos bien diferenciados:

Temperamento nervioso:

Manos: Frías, secas, tirando a huesudas.
Dedos: Lisos, largos, ahuesados o cónicos.
Líneas: Finas, bastante numerosas y no claras.

Tendencias más notables: Imaginación desbordante, con capacidad creativa, brillantes iniciativas, pero sin facultad de realización; meticuloso, excesivamente detallista. Exagerado en sus impresiones; cualquier hecho normal lo amplía, lo agiganta, haciendo una tragedia de una insignificancia; versátil e impresionable.


Temperamento bilioso:

Manos: Secas, calientes, duras.
Dedos: Largos, lisos, gruesos, cónicos o de espátula.
Líneas: Profundas, numerosas, bien dibujadas y largas.
Tendencias más notables: Autoritarios, ambiciosos, muy susceptibles, voluntad fuerte. Bastante nobles, fuertes. Su forma de actuar es lenta y metódica.


Temperamento linfático:

Manos: Húmedas, frías, más bien blandas.
Dedos: Cortos, nudosos, cuadrados o de espátula.
Líneas: Largas o cortas, escasas.
Tendencias más notables: Coléricos, pero de cólera fría, controlada; glotones y sensuales. Pocos proyectos, apáticos, indiferentes. Muy calmosos.


Temperamento sanguíneo:

Manos: Calientes y húmedas, duras o elásticas.
Dedos: Cortos, nudosos, cuadrados o ahuesados.
Líneas: Fuertes, bien dibujadas, poco numerosas.

Tendencias más notables: Paternalistas, protectores, muy cambiantes en sus impresiones; ideas obsesivas, rápidos de acción, vitales y resistentes.